THE BEATLES: Norwegian Wood (This Bird Has Flown).

En los últimos 8 años, desde que dije por primera vez “Soy fan de los Beatles” he nombrado demasiadas de sus más de 200 canciones como “Mi canción favorita”. He pasado de “Don’t Let Me Down” o “Anytime At All” hasta “For No One”. Pero en realidad, Don’t Let Me Down me recuerda a alguien. For No One, me recuerda un momento. Anytime At All, nomas me alegra la existencia. Ninguna tenía un real PORQUÉ. Hasta que con el paso de los años me di cuenta, que la que nunca “pasó de moda” para mi, fue Norwegian Wood. Y a continuación las razones por las cuales esta canción es definitivamente “Mi canción favorita de los Beatles”.

Rubber Soul

Mi disco favorito es el Rubber Soul. Fue el primer disco en el que comenzaron a explorar nuevos sonidos, a experimentar con nuevos instrumentos y sus letras ya comenzaban a mostrar un poco más de seriedad o contenido. Osea, ya no le pedían a una niña que se deje tomar de la mano mientras sacudían sus hermosas cabelleras.  Norwegian Wood es la segunda canción del disco.

Armonía

Yo soy totalmente Lennon/McCartney, nomas no puedo inclinarme más hacia uno sin regresar al otro, adoro a los dos por igual. Al empezar la canción, sólo se escucha a John cantar, una voz más dulce que la ronca de sus años más jóvenes y en la segunda estrofa “She asked me to stay and she told me to sit anywhere” se puede escuchar al fondo a Paul cantar con él. La mejor armonía a mi gusto entre Lennon/McCartney.  Se escucha mejor con audífonos. Normalmente, quien cantara la voz principal, las armonías las hacían los otros dos, ejemplo: Canta John, Armonizan Paul y George. Y así. Pero solo escuchar a Lennon y McCartney, es lo MÁXIMO para mi. Se me hace la piel chinita cada que escucho esta canción con audífonos, me encanta.

Historia

La gran mayoría de las canciones de los Beatles tienen una historia de fondo. Por ejemplo, el titulo “It’s Getting Better” se le ocurrió a Paul al ver que el cielo se despejaba después de mucho llover. George escribió “Don’t Bother Me” en una habitación de hotel de NYC mientras estaba enfermo y de mal humor. Todas tienen una historia. La de Norwegian Wood es que John quería contar sobre sus aventuras extramaritales sin que su mujer lo entendiera, hacerlo de una manera casual. Se dice que esta historia nació de una aventura que tuvo con su vecina, la esposa de un fotógrafo. Otra que era sobre una reportera. Pero en una entrevista dijo que no recordaba que fuera sobre alguien en especial, sino que todas sus ‘aventuras’ en una. Se llama Norwegian Wood porque era una madera barata, imitación de pino muy popular y la casa del en ese entonces cuñado de Paul McCartney estaba tapizada de Norwegian Wood.

Letra

Yo soy una romantica empedernida y cualquiera pensaría que “The Long And Winding Road” o “Here, There and Everywhere” serían mis favoritas por su nivel de cursilería. Pues no, esas típicas canciones de amor o desamor en cualquier momento te pueden recordar a alguien y arruinarlas por completo. En cambio, creo todos hemos tenido, alguna vez en nuestras vidas, alguna aventurilla por ahí, que no dolió, fue fugaz y no duele recordarla. Y bueno, me gusta la historia, como juegan con él, como amanece solo y como termina vengándose.

Y bueno, esas son mis múltiples razones para amar Norwegian Wood tanto como la amo.

La Música como estilo de vida.

Desde que tengo uso de razón, mi vida gira en torno a la música. No, no conozco términos, ni tecnicismos musicales, muchas veces no sé ni siquiera reconocer un género musical, pero para mí la música es MI VIDA. Yo soy de la clase de personas que se levantan y ponen música en lo que se preparan para ir a trabajar, que escuchan música todo el camino al trabajo, lo mismo de regreso y que se pasan el día entero con canciones a todo volumen en su PC a lo largo del día (Sí, hasta al baño meto bocinas). Los únicos minutos del día en los que no ando oyendo música es cuando ando trabajando, durmiendo o no hay al menos un radio a la mano.

Me ha tocado conocer a toda clase de “conocedor” musical. De los que saben de todo sobre el Metal, todo sobre Grunge, todo sobre Boleros, todo sobre Pop, todo sobre Hip Hop, bueno… yo escucho de TODO, no discrimino nada. Puedo decir, que a lo largo de los años mi cerebro se ha convertido en una rockola humana. Me han criticado por verme cantando cumbias, banda, o canciones de Lupita D’Alessio cuando me conocen por amar a The Beatles o por escuchar mucho Rock. Para mi, la música es mi medio principal de desestrés y drenación de frustraciones, sentimientos o cosas que nomas no puedo expresar, así que si una canción de la Paquita la del Barrio dice algo con lo que me identifico, entonces, LA ESCUCHARÉ. Si me hace reír, bailar o pasar un buen rato, también la escucharé. Amo la música.

Amo conocer gente que me aporte algo en el ámbito musical, tengo un amigo que vive en Guadalajara por el cual mataría porque viviera en Mérida, ya que llevamos sesiones enteras de recomendaciones musicales. Me dice una banda, su disco favorito de la misma, sus canciones favoritas de ese disco, lo escucho todo, le doy mi opinión y si puedo aportar algo, le recomiendo algo que no haya escuchado antes.

Para mi, escuchar un disco es como hacer la tarea. No hago NADA más que escucharlo, presto atención, a la música, la letra, TODO. Hasta busco las letras por internet para no perderme nada. Y hago lo mismo con todos los discos o bandas que me recomiendan y si pasan la prueba, entonces descargo más discos y lo mismo. Y es así mis queridos amigos, como es que conozco tanta variedad de música y ya tengo casi 15,000 mp3.

Obviamente, no todos los artistas tienen ese proceso (más bien, son cuando me recomiendan una banda o me da real curiosidad escuchar a fondo bandas que ya conocía). Por ejemplo, la música del populacho tipo LMFAO, la de Nossa Nossa no sé qué y demás, también termino aprendiéndomelas de tanto que las escucho (normalmente, las descargo ya que pasaron de moda, en ese aspecto soy re lenta haha) pero igual las escucho porque me divierten, como para manejar o ambientar fiestas.

Y también está el hecho de que soy NIÑA y soy excesivamente ROMANTICA, así que si una canción de Ha-Ash habla de lo roto que anda mi corazón o una canción de Luis Miguel (LO AMO) habla de lo mucho que estoy enamorada, también la escucharé.

Hay muchos factores. Si me preguntan por qué tengo dos discos de los Jonas Brothers en mi iPod les diré que por mi sobrina, tanto que me ha hecho escucharlos que les agarré el gusto y hay dos que tres canciones que hasta las canto con pasión. Mi mamá desde muy peque me ha hecho escuchar a José José y sus coetáneos.  Pero curiosamente, cada artista tiene un POR QUÉ y recuerdo casi siempre como comencé a escucharlos. Por ejemplo que escuché a los Doors porque mi ex novio los ama (ahí está, lo acepté) o que escuché a Nirvana porque mi compañero de junto en la prepa sólo de eso hablaba o que conocí la música de Buddy Holly gracias a John Lennon, siempre hay un por qué.

Y me vale que me critiquen mis variados gustos musicales. No soy una persona cuadrada en ningún aspecto, mucho menos en la música. No porque sea generalmente rockera no puedo disfrutar una buena balada o una cagadísima cumbia. Hay UNA persona a la que siempre vi como el máximo conocedor musical y que algún día quería llegar a saber todo lo que él sabía (no supe cuando lo superé) hasta que el solito dijo un día “Ella sabe mucho más que yo, si escucha mucha basura, pero en conocimiento general, sabe más que yo” me quité el sombrero y dije “Gracias, Sensei”.  Y como ya dije, conozco a mucha gente culta musicalmente hablando, pero tienden a caer en el encasillamiento de su género predilecto, si son grungeros, sólo escuchan grunge, y sí, saben TODO sobre grunge. Yo puedo decir que no sé todo de nada, pero si sé un poco de MUCHO.

Amo cuando las personas tienen dudas sobre alguna banda o alguna canción y van a mi, pensando que sé la respuesta a su pregunta (y amo aún más, cuando sí la sé). Para mi la música lo es TODO. Así que no se sorprendan si termino hablando sobre el último disco de alguna banda, como si fuera lo mejor que me ha pasado en el mes (porque usualmente, ASÍ de mucho disfruto escuchar un disco).

Vivo en mi propio mundito musical y nadie nunca me hará salir de él. ¡VIVA LA MÚSICA!.

Nirvana

Al igual que con los Beatles, no puedo recordar algún momento en particular en el que haya ‘descubierto’ a Nirvana. Es de esas bandas con las cuales creces sin darte cuenta. Cuando Kurt Cobain murió, yo ya sabía de Nirvana por mis primos, pero obvio, simplemente por la música y por el hecho de que la muerte de este susodicho Kurt los hizo llorar como María Magdalena. Tenía sólo 8 años (casi 9) y no causó más impacto en mi que el ver a mis primos “grandes” llorar como bebés.

Por alguna razón, a lo largo de mi vida parece que siempre me supe canciones como (obvio, las mega conocidas) Smells Like Teen Spirit, Lithium, Come As You Are, etc. Pero aún no había ese momento de amarlos obsesivamente como los amo ahora. En mis años pubertos yo era patéticamente popera, pero cuando entré a la prepa me pasé al lado oscuro. En la escuela, cada mes nos asignaban un lugar y no nos podíamos mover y fue entonces cuando El Sarge y Dayan se sentaron junto a mí, Dayan del lado izquierdo y el Sarge del lado derecho, por lo consecuente me pasaba clases enteras escuchando debates sobre “Escucha a Nirvana” “No, escucha a Guns n’ Roses”. Me escribían los nombres de canciones que pensaban me gustarían y que debía de escuchar, pero jamás que preste mucha atención porque en ESE preciso momento yo andaba centrada y concentrada en Linkin Park. Era el 2001, así que You Know You’re Right sonaba en la radio y pasaban el video incesantemente en MTV (cuando AÚN pasaban videos y yo AÚN veía televisión). Nirvana iba ganándose mi corazón, de plano escuchaba mucho más a Nirvana que a Guns n’ Roses y hablaba mucho más con Dayan al respecto que con el Sarge. Iba conociendo más sobre la banda (más que lo típico, banda de Grunge de Seattle cuyo vocalista se suicidó). Realmente me gustaban mucho y los escuchaba mucho, pero aún no daba el paso a decir “Soy fan de Nirvana”.

Es bien sabido que yo antes de fanatiquear con una banda, escucho su música, realmente la escucho. Primero me traumo con la música y luego escarbo los detalles de su historia y sus vidas. Del 2001 a finales del 2003 me dediqué a escuchar lo que tenía de Nirvana. A finales del 2003 me cambié de escuela, mi banda favorita andaba en un break y yo tenía tiempo libre para curiosear con respecto a otras bandas. Curiosamente, yo no me compré el típico disco de Nirvana (osease el Nevermind) sino que me compré Bleach mi disco favorito (ooobviamente) ya que desde un principio me traumé con “Scoff”. Un amigo me regaló una copia del In Utero (que aún no compro original, yo muy mal) y eventualmente me compré el Nevermind.

Para ese entonces era una rapazuela sin trabajo, por lo consecuente, juntar dinero era DÍFICIL, pero jugaba boliche y andaba en torneos, en las finales siempre ganaba alrededor de 800 a 1,000 pesos en premios individuales, así que a finales del 2004 cuando salió el With The Lights Out, obvio no me lo compré enseguida porque… repito, era pobre. Pero junté mis centavitos y al menos para el 2005 ya era mío. Sólo cuando ahorro para algo de una banda, sé realmente lo mucho que me gusta y Nirvana ya estaba en mi top de bandas favoritas. Tampoco me he comprado cuanto disco hay de Nirvana porque ahora perdí la bella costumbre de comprar discos y en ese entonces igual me empezaba a gustar The Doors. Mi poco dinero se iba entre Nirvan y The Doors. Pero para el 2005 ya estaba bien establecida como fan de Nirvana. Cuando me di cuenta ya tenía discos, DVD’s, posters y un kilo de información en mi cerebro.

En el 2004/2005 igual comenzaban a gustarme los Beatles… en el 2006 ya era una fan incondicional de mis Fab Four, así que TODO mi dinero se iba en ellos haha. Pero más o menos en el 2007 me compré Heavier Than Heaven (la peor biografía sobre Kurt Cobain) pero mi primer libro de Nirvana. Para el 2007 tuve mi versión chafita del Unplugged en DVD que por fin logré conseguir original en el 2008 (me la regaló mi hermano haha). Y aún no entiendo POR QUÉ no tengo el disco si es mi disco favorito no de estudio de Nirvana (no puedo oír UNA canción, siempre lo escucho TODO de principio a fin). Gracias a mi pendejez, presté mi DVD Teen Spirit y jamás volvió a mi (MALDITO, CHAB!!!).

Eso sí, amo a Nirvana con todo mi corazón, pero hay mucho de ellos que no sé, me pasa igual que con The Doors, sé mucho, pero no lo sé todo, ni me sé todas las canciones y demás (y comparando, creo sé más de The Doors que de Nirvana y así). No como con Linkin Park o The Beatles (de las cuales si me sé todo o casi todo haha). Pero como desde un principio, de Nirvana voy conociendo a lo largo del camino. Pero de que los amo, LOS AMO!.

Y así fue como comenzó a gustarme Nirvana :)

No esperes que te espere...

... después de mis 26

Yo tengo el pésimo vicio de darle una canción a momentos, situaciones o etapas de mi vida (llamándole siempre ‘Canción para cada ocasión’). Pero muy pocas veces me ha pasado, que casi una década después vuelva a verme reflejada en una letra de una forma tan literal como la primera vez. Es un poco frustrante el abrir los ojos y darte cuenta que avanzaste tanto por tantos años pero al final volviste al mismo punto de partida (aunque sea una situación o personas totalmente diferentes).

La canción “No” de Shakira salió el 2 de Julio del 2005, en el momento justo y en el lugar indicado para darme valor y fuerza para que tomara una de las decisiones más importantes de mi vida adolescente a mis recién cumplidos 20 años. Cada que la escuchaba sabía que estaba haciendo lo correcto, me dolía el pecho y se me iba el aire la mayoría de las veces pero estaba SEGURA de que era la decisión correcta. Y así pasaron 7 años.

Hoy vuelvo a escuchar esta canción, sin dolor en el pecho, sin que me falte el aire, con el cerebro más funcional, madurez y un CHINGO de experiencia. Se podría decir que ahora la comprendo mejor (y la letra no tiene nada de complejidad) pero, sí, la entiendo mejor, podría decir que “La escucho con nuevos oídos”. ¿Qué pasó? Pues que pasé por algo SIMILAR (más no igual) a lo que viví a mis tiernitos 20 años y nuevamente me encontré en la necesidad de tomar una decisión y no, esta vez no la usé para darme valor, por experiencia y sentido común la tomé, pero como por cosa del destino me encontré de nuevo escuchando la canción, pero esta vez comparando el hoy con el ayer, mi yo de ahora con mi yo de antes. Y he aquí este post.

No, no intentes disculparte

No juegues a insistir

Las excusas ya existían antes de ti.

Cuando estás pequeña y no has realmente vivido cosas similares, cualquier cuento chino te parece legítimo, agregándole también el sazón de la ingenuidad que quiere creer cualquier cuento chino que te haga sentir mejor. Escuchaba esta estrofa una y otra vez y bueno, yo siempre me creí cualquier excusa dada que me hiciera creer que el mundo seguía siendo de caramelo. Hoy en día cuando digo “No quieras venderle chiles a Herdez” es porque ya no me creo esos cuentos chinos tan fácilmente y no, por favor, no quieras venir a venderle chiles a Herdez.

No, no me mires como antes

No hables en plural

La retórica es tu arma más letal

Tomar una decisión es difícil, más aún cuando el sentimiento no se ha ido, cuando no te dejan alejarte, cuando los cuentos chinos son convincentes pero aún así sabes que solo son eso, cuentos chinos. A los 20, no pensaba así, repito, a los 20 me creía todo.

Voy a pedirte que no vuelvas más.

A los 20 o a los 26, esa línea siempre me va a golpear. Tomar la decisión de alejarte definitivamente de alguien siempre será difícil, no importa la edad ni la madurez mental o emocional, simplemente está CABRÓN. Pero a veces, por el propio bien mental, emocional y físico es necesario pedirle a ese alguien que nomas no vuelva.

Siento que me duelas todavía aquí, adentro.

A los 20 años, obviamente el que “Todavía me duelas” era hasta estúpido decirlo, estaba reciente, novedoso, salidito del horno. Pero crecí y ahora me reprimo a mi misma cuando pasa el tiempo y aún me “importa” alguien, a veces hasta me digo “Vamos, no tienes 19 años”. Así, que a veces me siento de lo más tonta cuando aún duele.

Y que a tu edad sepas bien lo que es

Romperle el corazón a alguien así.

Y aquí otra ironía. Quién va a saber lo que es romperle el corazón a alguien a los 20 años? Bueno, al menos un experto no era, estoy casi segura que era el primer corazón que rompía. Pero como nos ponemos el papel de los super maduros, conocedores del tema, que lo hemos vivido todo, nos sentimos los más maduros del mundo cuando a los 20 años sigues siendo un RAPAZUELO. Pero bueno, sólo me dan ganas de regresar el tiempo y decirle a mi yo del pasado “Tranquila, te vas a topar en un futuro con verdaderos expertos” (y otros que tomaron experiencia cof cof haha). Pero sí, hoy en día sí es más probable que una persona realmente sepa lo que es romperle el corazón a alguien.

No se puede vivir con tanto veneno,

La esperanza que me dio tu amor

No me la dio más nadie,

Te juro, no miento.

“Más nadie” claro que no, repito, era una rapazuela inexperta, primera vez que sentía algo por alguien… obvio, hasta en ese entonces la esperanza no me la había dado más nadie. Y ahora, ya me la había dado alguien más antes que tú haha.

No se puede vivir con tanto veneno,

No se puede dedicar el alma

A acumular intentos

Pesa más la rabia que el cemento.

Eso es TAN cierto. No te puedes desvivir intentando a que algo funcione. Cuando algo es para ti se debe dar natural, no tienes que desgastarte para hacer que funcione. Las segundas, terceras o cuartas oportunidades o intentos son inútiles, si no funcionó a la primera no va a funcionar a la décima, no importa cuánto lo quieras. Y la última línea “Pesa más la rabia que el cemento” me gusta mucho. A los 20 años, sufrí, lloré, pero jamás realmente quise alejarme del susodicho. Ahora si comprendo lo que es estar más enojada que enamorada. Cuando te enojas, cuando te decepcionan, es mucho más fácil decir “Ok, hasta AQUÍ”. Y esto es hasta ahora, de peque estaba tan enamorada que aunque me vieron la re vil cara de pendeja, jamás me enojé porque ahora sí que estaba “ciega de amor” haha.

Espero que no esperes que te espere

Después de mis 26

La paciencia se me ha ido hasta los pies

Hace casi 7 años pensaba que el “Después de mis 26” estaba MUY lejos, hoy estoy solo a 4 meses del “después de mis 26”, osease, mis temidos 27 años. No puedo creer que haya pasado TANTO tiempo de mi primer corazón roto y que a estas alturas vengo a caer en el segundo. Pero bueno, ni la primera, ni la segunda, esperaré a mis después de mis 26. En 4 meses, la etapa de esta canción expirará, ya ésta frase no significará lo mismo.

Y voy deshaojando margaritas

Y mirando sin mirar

Para ver si así, te irritas y te vas

Sinónimo de: “¿No te das cuenta que te estoy mandando a la MIERDA?”.

Es siempre más feliz quien más amó...

... y ese siempre fui yo…

Bueno, hoy quiero hablar sobre la “responsabilidad” moral que tiene la persona que “quiere menos” en una relación (de cualquier tipo). Porque bueno, me ha pasado a mí y he visto a personas cercanas a mí en ambos lados (el que quiere más o el que quiere menos). Y como siempre, cada cabeza es un mundo, así que nomas compartiré mi MUY personal punto de vista.

Yo nombré “responsabilidad” (nomas por darle un nombre) al hecho de que está en las manos del que quiere menos el destino que le depara al que quiere más. Porque TODOS (sin excepción alguna) siempre sabemos cuando tenemos el mango del sartén bien agarrado y a veces este poder es abusado. A que me refiero?. Que muchas veces (más bien siempre) tenemos bien medidas a las personas, sabemos lo que harían y hasta dónde llegarían por nosotros. Es decir, que, aún sabiendo que no les vamos a responder equitativamente tomamos todo lo que podamos y creamos merecernos.

Pero no generalizaré, hablaré más bien en el ámbito amoroso. En una conversación me culparon de alguna vez darle alas a un amigo cuando sabía que yo le gustaba. ¡STOP!. Jamás le he dado alas a nadie, nunca (a menos claro, que me guste). Primero, el niño jamás me dijo “Oye Majo, me gustas” segundo, si, si sabía y aún así salía con él a fiestas y demás (siempre plan de amigos) porque bueno, el hecho que le guste no elimina el hecho de que es mi AMIGO, no?. Tercero, darle alas a un niño es demostrarle que me gusta o que tiene chance, pero yo tan como soy, siempre le cuento a mis amigos “Me gusta fulano” osea, ya de plano le cerré la ventanita del amor (jajaja).

Luego, en esa misma conversación me dijeron “Hubieras hecho lo que hacen todas, lo hubieras besado, ilusionado y dejado que este como perro atrás de ti”. ¿Perdón?. JAMÁS. Por qué?. Porque me ha tocado estar en el lugar de “El que quiere más”. Y porque no necesito a un cabrón atrás de mi como perro.

Jamás entenderé como la calentura de una persona puede ser más fuerte que el bienestar de otra. Bueno, uno no puede culparlo no? A quien le dan pan que llore?. Pero nunca es bueno abusar de los sentimientos ajenos. Sé que muy pocas personas pensarán como yo (creo nadie). La persona que quiere más, siempre aceptará los términos y condiciones de la persona que quiere menos, por las simples ganas de estar con él/ella. Si el que quiere menos dice “No quiero nada serio” la que quiere más se aguantará (no siempre, claro) tal vez esperando un cambio a futuro (no sucede nunca) y el otro, ps fácil, se lava las manos, ya dijo lo que puede ofrecer (que es… nada).

Yo, como ser de una raza casi extinta, las veces que me he encontrado en la situación de que un niño no se me hace feo pero que sé que quiere conmigo bien y siente cosas por mi (que por equis o ye, yo no siento por él) nunca he dejado que acepte el término de “Dame todo mientras yo no te doy nada” aunque sepa y esté segura que lo aceptarían. Por qué?. Porque es algo MUY bajo. No voy a ilusionar y posiblemente lastimar a una persona que no tengo planes de querer. Tampoco voy a aceptar cariño solo porque me sienta sola, ni andar con alguien porque necesite que me levanten el ego.

Hoy en día es ya de lo más normal andar de “frees”. Bueno, hasta en esas relaciones siempre hay alguien que mezcla sentimientos (no siempre, pero sucede) y es OBVIO cuando eso pasa. Y como amiga de mil hombres, me recontra enoja ver situaciones en las que las niñas hacen las cosas por mero sentimiento y ellos muy quitados de la pena dicen “Pero yo aclaré que no era algo serio”. Claro que fue aclarado, pero si la niña te cuida, te da cariño, tiempo, dinero, te aseguro que no lo hace porque cojas muy rico, es porque TE QUIERE y lo mínimo que merece es que le digas “Mejor lo dejamos aquí”. Repito, no hay calentura que valga un corazón roto (ni que sea difícil encontrar a otra que neta no sienta nada por ti).

Y también están las mujeres que le dan mala fama a las demás. Tener a un tipo como perro, que paga todo, te lleva a todos lados y te presume como trofeíto a cambio de tu afecto (fingido y posiblemente solo sexual)… tiene nombre y es la profesión más antigua del mundo, se llama *redoble de tarola* Prostitución.

Y no digo que tener un “free” esté mal, de hecho, es de lo mejor cuando nadie siente nada más que simple atracción física (digamos que en estas situaciones, y disculpen el juego de palabras, se dan parejo). Pero cuando te encuentras en una situación en la que andas de “free” con una persona, la cual sabes de ante mano que siente cosas por ti (y tu no por ella), es totalmente TÚ responsabilidad si esa persona termina lastimada. Porque tu SÍ puedes decir basta, porque para ti SÍ sería fácil poner un alto, porque tú no quieres TANTO como para seguir así hasta salir lastimado. Y un “Le advertí” no vale, porque seguro aceptó nomas para estar con la persona que quiere.

Pero si estás con esta persona porque te quiere, porque te sube el ego, porque te trata bonito, entonces, o tienes un pinche serio problema de autoestima o nomas no tienes MADRE. Y cuando me preguntaron “Por qué no lo besaste para ilusionarlo y tenerlo como perro?” no sé porque no contesté “Porque tengo VALORES y ese trato no se lo merece nadie”. No porque esté sola, no porque necesite “cariñitos”, no porque me quiera sentir bien, le voy a romper el corazón a una persona que tal vez tenía sentimientos nobles y buenos.

Se los dejo de tarea.

Toma tu bellota...

Chiste local entre uno de mis mejores amigos y yo. Razón? Cuando pongo alguna canción dolida dice que son mis canciones de ardilla. Bueno, he estado mil veces en la posición de decir “Eres un maldito desgraciado pendejo que lo último que mereces es estar conmigo infeliz poca cosa” y… nunca lo he hecho. Cuando digo “Basta” es realmente BASTA. No quiere decir que olvide, no quiere decir que ya no duela, no quiere decir que me sea indiferente y tampoco quiere decir que no me enoje. Muchas veces he sentido enojo, pero me es físicamente imposible hablar pestes de una persona que fue en su momento especial para mí (aparte que no hay nada más patético e infantil). Lo más que me escucharán decir es “Es un pendejo” y créanme, eso hasta en la cúspide de mi enamoramiento lo escucharán, para mí siempre serán “Un pendejo”. Por qué lo digo? Porque con los ojos soñando y una sonrisa tatuada en mi cara he dicho “Me hizo sonreír, es un estúpido” jaja es parte de mi cariño jaja.

Yo soy esa mujer que habla maravillas de algún ex – amor,  al final del día sería denigrante decir “Me enamoré de una basura de ser humano” no?. Mi inteligencia y sentido común quedaría en duda. Cuando mucho diría “Me enamoré por pendeja”.

Y bueno, lucir como la ex bisteck ardida, jamás se me dará. Primero está mi orgullo y prefiero tragarme mis sentimientos antes de mostrarme “ardida”. Creo es más fácil que demuestre que me duele y que lo extraño con las mejores intenciones antes de gritarle a los cuatro vientos que ojalá nunca se le pare al maricón que me hizo llorar. Es más, soy de las que dicen “Su nueva chava neta está bonita” cuando otras despotrican veneno contra la nueva en turno.

En general, no entiendo por qué la mayoría de las mujeres tienden a ser unas pinches ardidas de lo PEOR jaja. Por qué mi dedicación a escribir al respecto? Porque estoy HARTA de leer a una estúpida en mi Face (que mantendré en el anonimato) que vive poniendo estupidez y media sobre su ex y fingiendo una exuberante felicidad sin él. Osea, decirle a tu mejor amiga “A la chingada, ya no voy a llorar por él, merezco algo mejor” es lo más normal, pero lloriquear en tu Facebook esta de HUEVA. Sobre todo si es DIARIO y de la manera más EXPLICITA. Yo si ando triste pongo una canción triste y el que lo quiera entender que lo entienda, pero no voy a poner “Traigo el corazón hecho añicos, ojalá nunca hayas aparecido en mi vida maldito, por qué no me dejas ser feliz?”. OSEA!. Li-mi-tes.

Pero bueno, jamás comprenderé la lógica humana. O soy una persona muy simple que no comprende la complejidad de estar dolido al punto de desearle la muerte a alguien o soy muy complicada y prefiero que mis chaquetas mentales se queden en mi cerebro antes de que alguien pueda asumir que me hicieron tanto daño que mi vida se paró porque él se fue. Tal vez un poco de ambas.

Esas mujeres...

Existen todo tipos de mujeres, existen las mujeres que hacen un drama por todo, que son celópatas, que se enamoran cada tres días y que olvidar es sinónimo de conocer a otro hombre (y que normalmente su estado de ánimo depende única y exclusivamente al hecho de si tienen novio o no). Y existimos las mujeres con problemas reales que nos aguantamos a lo macho, que nos cuesta abrirnos y confiar en las personas, que tomamos precauciones, que nos enamoramos una vez cada década, que somos fuertes, independientes y nuestra felicidad depende de nosotras. Ésta clase de mujeres no son unas "perras insensibles", todo lo contrario.

Estas mujeres son fuertes, han aprendido a base de golpes a levantarse, muchas veces también cargando con otras personas a sus espaldas, saben defenderse, cuidarse y hasta curarse las heridas. Si una de estas mujeres te pide ayuda, no lo hace por floja, no lo hace por que quiera que te hagas cargo de sus problemas, es por que ha llegado a su límite (el cual normalmente es muy alto, pero eso no evita que se rebase). Quiere decir que está cansada y después de mucho pensarlo, analizarlo a detalle, confió lo suficiente en ti como para ser TÚ quien la ayude, y normalmente si ve que la otra persona no puede "ayudar" nomas se dará la vuelta y no te volverá a molestar con su "problema", porque son tan independientes que odian ser una carga para los demás.

Estas mujeres han aprendido que las lágrimas cuestan caro y no las derraman fácilmente. Son como los hombres y sienten vergüenza de llorar, intentan tanto ser fuertes que no se permiten llorar, no se permiten quebrarse, no se permiten ser vulnerables, mucho menos delante de los demás. Si una de estas mujeres ha llorado delante de ti quiere decir que confía plenamente en ti y siente que su vulnerabilidad y momento bajo no será juzgado de manera equivocada. Cuando una de estas mujeres muestra vulnerabilidad y es tratada como "dramática" o "llorona" se sentirá ingenua y estúpida por haber demostrado tanto. No pensará "Pendejos, no me entienden" ni se pondrá el papel de victima, simplemente se culpará por ser tan débil y se prometerá no volver a hacerlo, levantando aún más sus barreras que ya de por si estaban altas. Cuestionará su criterio de selección y sentirá que se equivocó al confiar en esa persona (culpando a nadie más que a ella misma).

Estas mujeres no confían fácilmente, ganarse su confianza no es a base de "Toma y dame" ni esperan recibir lo que dan. Sólo piden honestidad. Cuando la confianza dada es abusada o traicionada, nuevamente se sentirá tonta y cuestionará de nuevo su criterio de selección. Estas mujeres pueden vivir a base de platicas cordiales y tratos amables sin nunca involucrarse emocionalmente si la confianza ha sido rota o si no se sienten totalmente seguras de alcanzar esa confianza (en ambos ámbitos, amoroso y de amistad). También pueden vivir perfectamente sin estas personas. Nunca nadie es indispensable para ellas (aunque pueda llegar a dolerles el perder a alguien, saldrán adelante).

Estas mujeres prefieren cuidar de los demás que ser cuidadas. Están tan acostumbradas a hacer todo por si mismas que les cuesta dejar que otros cuiden de ellas. Pueden parecer ariscas e insensibles, pero es el mismo miedo a acostumbrarse a algo que pueda lastimárlas a la larga. Estas mujeres te abrazarán cada que necesites un abrazo, te darán cariño, cuidado y hasta comida si así lo necesitas, pueden ser las personas más cariñosas del mundo, pero cuando les toca recibir este trato lo aceptan con excesiva cautela. Estas mujeres están acostumbradas a escuchar "Por qué no te dejas querer?".

Estas mujeres odian el drama, prefieren disculparse y alejarse antes de verse involucradas en un drama de cualquier tipo. Sus prioridades son diferentes y no les gusta ser comparadas, por lo mismo siempre se mantienen alejadas de personas problemáticas que disfrutan de dramas. Los conflictos les molestan, sobre todo si opinan que son tontos.

Lastimar a estas mujeres es fácil, pero intentarán de sobremanera nunca demostrarse heridas. En general, su misión en la vida es nunca mostrarse vulnerables, es por eso que muchas personas confunden una buena mascara con total falta de sentimientos y hacen con ellas lo que les place pensando que "al final de cuentas no sienten nada". Se esconden tras una mascara de humor, les gusta estar animadas, divertidas, estar de fiesta en fiesta, disfrutando la vida y prefieren que las personas piensen que "su vida es un Carnaval" que a que sientan pena, lástima o algo similar por ellas.

A estas mujeres les cuesta hablar de sentimientos (y a veces lo demuestran más de lo que llegan a decir o aceptar), les cuesta decir lo que tienen en la mente, casi nunca se quejan y por lo mismo parece que nada les importa. Se frustran mucho por ser así pero también viene incluido en el modus operandi de ser fuertes ante todo.

Estas mujeres también tienden a escribir como si hablaran sobre más mujeres cuando en realidad hablaban de ellas mismas y de nadie más.

Sincerely, "Esas mujeres".